VOLUMEN 16, Número 7                                                                                                         Febrero 18, 1994

Amados Chelas: 

Cuando tomaron tiempo para contemplar las mayores cualidades de la Primera Esfera, emergieron del Silencio con muchas preguntas. Esto es natural, queridos seres. ¡Cada aspecto de la Mente Divina es tan hermoso y con tantas facetas como el corte más complejo de una joya en la galaxia! Sin embargo, como un suave guijarro que yace debajo de las turbulentas aguas de un arroyo cristalino, cada Atributo Divino es sólo una pequeña parte del torrente que canaliza las aguas de la creación hacia el río y luego hacia el mar. 

Muchos han querido saber sobre el uso que le damos a los términos “Esfera”, “Rayo” y “Llama”. Saint Germain, al hablar con los estudiantes, hizo una declaración que les ayuda a diferenciar entre estos términos. Él dijo: “Yo permanezco dentro la Séptima Esfera y los bendigo con Mi Rayo de la Libertad. ¡Cuando absorben Mi Rayo, entonces se vuelven la Llama de la Libertad!” 

Se ha referido a Siete Esferas como el “aura de Dios” y pueden ser pensadas como el Cuerpo Causal de nuestros Dioses Padres, Helios y Vesta. Cada una de las Siete Esferas está interconectada y es interdependiente. Ellas son las vastas áreas deservicio comprometidas con la manifestación de las cualidades de Dios en todos los aspectos del universo perteneciente a los Dioses padres. 

Los Siete Rayos son los poderes radioactivos de las Siete Esferas, enviados a un planeta particular o a una estrella, para lograr la manifestación – llegando aún hasta la más lejana del Reino. Cada uno de los Siete Rayos consta de todos los varios atributos de la Esfera desde la cual es enviado. 

La Llama es la manifestación del Rayo. Un Rayo se vuelve Llama cuando una Divina Inteligencia – ascendida o no ascendida – se identifica con el nivel vibratorio de alguna parte del Rayo y luego encarna esa vibración. Así, cada Llama del Ser es una manifestación de una cualidad particular de la Divinidad. 

La Divina energía expresada a través de la Llama es siempre ascendiendo – representando la terminación de la Divina Idea originalmente enviada. Así, la Llama, en sí misma, es siempre la manifestación de la perfección, sin tener en cuenta el atributo que está siendo manifestado a través de ella. 

Unque los términos “Rayo” y “Llama” son con frecuencia usados como sinónimos, es útil tener un entendimiento de la realidad de la Llama como una expresión del Rayo. Cuando reconozcan y comprendan la actividad mientras esta tiene lugar, serán capaces de ser más específicos al dirigir la Luz hacia la manifestación en el mundo de forma. 

Al discutir los atributos de la Primera Esfera, explicamos cómo cada Divina Cualidad  se convierte – primero en un efecto de la Mente Divina y luego la causa para un efecto resultante Aquí se aplica el mismo principio. Cuando una Divina Inteligencia decide encarnar una parte del Divino Principio, invoca la actividad de la Esfera involucrada. El Rayo surge desde la Esfera y la Llama del Ser es el resultado. En el punto en que la Llama se vuelve manifiesta, la sustancia de la Mente Divina comienza su retorno al Hogar, para ser enviada nuevamente al impulso de la Mente Divina. 

Cuando invocan a un Maestro Ascendido para que los asista en el trabajo enviando su llama, están invocando la tangible Presencia del Maestro en este trabajo. El Maestro les responderá enviando un momentum de Divina Energía que es calificado con todos los atributos de su Llama del Ser personal. 

Por ejemplo, cuando invocan la actividad del Séptimo Rayo, recibirán un momentum de todos los Divinos Atributos de la Séptima Esfera, incluyendo las cualidades particulares expresadas a través de la Llama del Maestro a quien llaman. 

Pueden comenzar a incorporar este entendimiento en el trabajo diario  volviéndose concientes de la invocación a la Luz. Comiencen por visualizar la actividad mientras esta tiene lugar, manteniendo en mente la máxima “como es arriba, es abajo”. Las Leyes que gobiernan el movimiento de la Divina Energía continúan cuando el Rayo es recibido por el Cristo Interno. ¡Véanse volviéndose esa Llama, mientras reciben la Luz que han invocado! ¡Vean cómo se mueve la Luz desde ustedes en un poderoso Rayo y luego vean la Llama manifestad en el Ser y mundo de aquellos por quienes hicieron una llamada! 

¡Amados seres, entren en la cámara más interna del Corazón, ahora mismo, y acepten Mi Llama de Hermandad! ¡Sientan la esencia de mi Ser, mientras nos volvemos Uno! ¡Yo los amo, queridos chelas! ¡Acepten mi Amor!

Juan, el Amado.

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