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Las Cartas de Shamballa

 VOLUMEN 16, Número 45                                                                                                             Noviembre 11, 1994

Amados y fieles estudiantes de la Única Luz: 

Los saludo hoy con todo mi amor y constancia de atención y servicio. ¡Los que servimos en las octavas de luz estamos agradecidos! - ¡agradecidos! - ¡agradecidos! – por la perseverancia y fiel dedicación a la Luz de Dios que es eternamente victoriosa. 

Durante este año de iluminación, se les han presentado muchos finos puntos de la ley cósmica. Con frecuencia han encontrado, especialmente dentro del mundo de sentimientos, que ha sido difícil entender y asimilar muchos de los principios dados. ¡No se permitan estar desanimados sobre esto, amados seres, porque lo están haciendo muy bien! Mantengan en mente que vuestros espíritus son un poderoso cáliz de luz y ni una gota del divino elixir vertido dentro de esta sagrada copa será perdida. Cuando la sed espiritual esté en ustedes, beban profundamente de esta sagrada sustancia y en la plenitud del tiempo de Dios, llegarán a entender completamente.  

Les hemos dicho que no hay límites para el disponible suministro de energía universal y están encontrando, mediante las experiencias personales, que esta declaración es realmente verdadera. Sepan también que la energía nunca se pierde, porque el libre fluir de la sustancia de nuestro Dios Padre-Madre está siendo usada y re-usada continuamente por las formas de vida por todas partes. Aún la energía de una negativa naturaleza puede fácilmente ser purificada y recalificada, de modo que pueda una vez más estar disponible para el uso de toda vida. Esto puede ser obtenido ya sea conciente o inconcientemente y es sobre este punto particular que vuestro entendimiento debe ser trasladado a la acción. 

Cuando se vuelven conocedores del proceso creativo y el modo en el cual la humanidad participa en este proceso – se vuelven parte del grupo que puede y debe redimir la energía, de modo que pueda rápidamente ser retornada al Origen. Allí, es una vez más liberada dentro del universo para el uso del libre albedrío de las corrientes de vida por todas partes, mientras ellas progresan sobre sus senderos evolutivos. ¡Cuando ustedes son conocedores de este proceso y participan concientemente en esta actividad, entonces ella se vuelve no sólo una habilidad que han adquirido sino una responsabilidad que han aceptado! 

Les pido que ahora consideren la palabra “redimir” y el concepto de redención, conscientemente decidiendo ser un “redentor”. Desde el comienzo de la dispensación Cristiana, esta palabra ha sido sinónimo del Espíritu Crístico. A través del más amplio entendimiento ustedes han llegado a comprender que esta cualidad es necesaria en cada plano donde existe probablemente mal uso o mala interpretación de la energía, como resultado de las libres elecciones de las corrientes de vida encarnadas y  ¡cada vez que redimen la viviente sustancia de nuestro Dios Padre-Madre, ustedes son el Cristo en acción! 

Redimir no sólo significa mantener libre, es también aclarar y restaurar. Ya sea que trabajen para ustedes mismos o combinen las energías en un unificado vaso a través del cual las energías cósmicas puedan ser vertidas hacia la tierra, se utiliza una gran cantidad de fuerza de vida personal. Ustedes encontrarán que más perfectamente puedan funcionar como un puro y claro canal para esta energía, mayor será el retorno a ustedes desde vuestro Dios Padre-Madre y mayor será el servicio – el de purificar y transmutar la energía mal calificada. 

Una vez que han elegido servir como chelas de los Maestros Ascendidos, esto se vuelve una de las principales funciones sobre el plano físico. Son verdaderamente una “puerta abierta”, un “cáliz de luz” o un “puente” a través del cual individual o colectivamente, ustedes sirven como el Cuerpo de Luz mediante el cual la sanación, la sostenedora sustancia de los Dioses Padres y todos sus emisarios pueden fluir hacia la tierra. ¡Es ante vuestro amor, constancia y dedicación a este servicio que Yo humildemente me inclino como cada día, a través de vuestra incrementada sabiduría e iluminación, ustedes amorosamente manejan más y más poder, haciendo mayores cosas por este amado planeta Tierra! 

Dwjal Khul

 

 

 

 

 

 

 

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